2018
Esta exposición consta de 75 obras elaboradas por niños y jóvenes de Fundación Alter Ego, Fundación Chilena de Parálisis Cerebral.
En un contexto de Arte terapia estas obras fueron naciendo a través de matrices de las distintas partes del cuerpo de un pájaro. Teniendo varias formas de alas, picos, patas, cola, etc., los niños jugaban a armar distintas aves, todas con diferentes entre sí, con distintas características, formas y colores.
Este proceso creativo promueve la elección personal y la capacidad de decisión, ya que el niño logra comunicar cómo prefiere ir definiendo su obra, si su pájaro tendrá las alas largas o la cola corta e imaginar si su pájaro es de la selva, de la cuidad o si vive en el sur de Chile. Es así como el arte promueve múltiples posibilidades de elección e imaginación y es una oportunidad que el niño tiene de decidir por sí mismo.
Además el trabajo plástico involucra la materialidad que estimula sus sentidos y fomenta la exploración y creatividad. En este proceso se busca que el niño pueda trabajar lo más autónomamente posible. Usando las matrices, el niño puede poner en la tela pinceladas de colores libremente, aprovechando sus propios movimientos que vayan surgiendo, al ser asistidos para trabajar. Luego al sacar la matriz, queda la forma definida. Así forma sobre forma, van formando de a poco ese pájaro, su pájaro, su obra. El poder verlo y reconocerlo, al pensar este cuadro es mío, lo hice yo, llena al artista de una sensación de pertenecía y orgullo.
Simbólicamente este proceso creativo eleva la imaginación de cada niño y nos invita a elevar nuestras miradas, al mirar a los artistas de Fundación Alter Ego y sus obras, y observar sus diferencias y diversidad. Todas estas obras nacieron de las mismas matrices, pero todos los pájaros son diferentes y especiales. Estos conceptos nos invitan a pensar en la inclusión y en la responsabilidad que todos tenemos para que estas aves emprendan su vuelo en una sociedad más libre e inclusiva.
